Los españoles realizan una media de ocho videollamadas a la semana durante el confinamiento

• Según el “I Estudio sobre Tecnología y Emociones” elaborado por WIKO, las videollamadas han sido una de las herramientas clave para cumplir con el reto de quedarse en casa, ya que han permitido a los usuarios sentir que estaban muy cerca de sus seres queridos.
• El análisis también recoge que casi un 80% de los usuarios han utilizado este servicio de comunicación durante la cuarentena para mantener el contacto social.
• 2 de cada 3 entrevistados han celebrado algún evento a través de la pantalla, siendo los cumpleaños (32,91%) uno de los motivos más repetidos por los que se han organizado estas quedadas.

8 de cada 10 españoles de entre 18 y 65 años (79,53%) han apostado por las videollamadas como una vía para comunicarse desde sus hogares durante el confinamiento. Así lo refleja una de las principales conclusiones que se desprenden del “I Estudio sobre Tecnología y Emociones” elaborado por el fabricante europeo de smartphones WIKO.

En este informe, la compañía ha analizado a través de una encuesta a más de 1000 españoles de 18 a 65 años de edad cuál es el uso que los usuarios han hecho de la tecnología durante el aislamiento en sus casas, y cómo el smartphone se ha convertido en una ventana desde la que expresarse y sentirse más cerca de la familia, la pareja o los amigos.

Olvidar la distancia física, el gran poder de las videollamadas
Según este estudio, los españoles han realizado una media de 8 videollamadas a la semana durante la cuarentena. Por género, son las mujeres las que más han participado en videoconferencias, con una media de casi 9 a la semana, frente a los hombres, que han realizado 7 videollamadas. Por rango de edad, los jóvenes de 18 a 24 años son quienes han superado este dato semanal con una media de 13 videollamadas.

Al centrar el análisis exclusivamente en la población que ha utilizado este servicio de comunicación durante el confinamiento (79,53%), la media semanal asciende a 10 videollamadas.

Mantener las celebraciones para combatir la nostalgia y la soledad
Durante las últimas semanas, se han celebrado eventos a los que los invitados han asistido a través de una videollamada. Los ha habido de todo tipo y han participado 2 de cada 3 españoles (64,54%) que, gracias a ellos, han podido juntarse con los suyos y dejar a un lado la tristeza que en algunos casos les causaba el estar lejos.

Entre los motivos más frecuentes por los que los encuestados han afirmado haberse sumado a estas citas online, se encuentra el de estar en contacto con los niños de la familia o de los amigos (40,55%) y celebrar un cumpleaños (32,91%). Aunque también se han organizado videollamadas para alegrarse por la superación de una enfermedad (4,21%), dar la bienvenida a un bebé recién nacido (3,92%) e, incluso, asistir a una boda (1,27%).

Quedar a través de la pantalla, una solución clave para cumplir con el #yomequedoencasa
En el I Estudio sobre Tecnología y Emociones de WIKO también se ha reflejado que las videollamadas y las redes sociales se han convertido en herramientas fundamentales para ayudar a crear conciencia social sobre la situación de crisis sanitaria provocada por el COVID-19. Estas herramientas han facilitado que las personas pudieran permanecer en sus casas manteniendo el contacto con sus seres queridos en todo momento, así como recibiendo información y entretenimiento.

De hecho, un 32,03% de los encuestados cree que las redes sociales han sido cruciales para difundir información sobre la crisis sanitaria y crear concienciación sobre la importancia de quedarse en casa. Por su parte, un 32,71% considera que han sido importantes a nivel general, mientras que un 24,19% afirma que iniciativas como asistir a conciertos por Instagram o visitar museos virtuales han servido para entretener a la gente en sus casas durante el confinamiento. Estos datos confirman que 9 de cada 10 encuestados (88,93%) han afirmado que las redes sociales han sido clave para sensibilizar sobre las medidas de confinamiento, una cifra que aumenta en los grupos de edad de 18 a 24 años (95,5%).